lunes, 24 de agosto de 2015


Estar de Luto no es vestirse de negro. 
Estar de Luto es encontrarse desnudo ante el dolor,
 totalmente vulnerable.

Hay una escena de El rey Lear de Shakespeare, donde el anciano monarca entra en el escenario llevando a su hija Cordelia, muerta, entre sus brazos. Se trata de una imagen icónica de la pérdida trágica, una metáfora que representa "el peso del duelo".
El duelo es peso. Es algo que se soporta, una pesadez que se aprende a llevar a cuestas. En esta escena, Lear dice un parlamento que es inusual en Shakespeare. Es una sola palabra que el personaje repite una y otra vez. Cinco veces. La palabra es "nunca". El viejo rey mira el cuerpo inerte de su hija y, sabiendo que nunca más tendrá vida, dice: "Nunca, nunca, nunca, nunca, nunca". Lear debe decirlo cinco veces porque "nunca" es un concepto muy difícil de aceptar.
El duelo es el peso del nunca.

domingo, 23 de agosto de 2015

Fueron el 6 y el 10 de agosto.
Fueron una madre y una hija destrozada.

Fue darle la noticia a todos.
Fueron muchísimos amigos en la vigilia.
Fueron las preguntas de los compañeros de la universidad.
Fueron las maestras de toda su vida.
Fue el insecto que se ahogó y se quemo en la cera de las velas.
Fue la hermana que nunca lloraba la que se desmorono en llanto en la vigilia y en el cementerio.
Fue el sudor que escurría por la espalda de los sepultureros.
Fue mi mejor amiga que lloraba a mi lado.
Fueron los vecinos y los compañeros de la escuela.
Fue incomprensible.
Fue la manera en que pronto no pude recordar su rostro.
Fueron los mensajes con palabras sentidas y evocadoras.
Fue solo un pequeño ángel.
Y fue el hombre alto en la colina durante el entierro que puso todo en palabras:
El cielo ahora tiene un nuevo ángelito.

jueves, 20 de agosto de 2015

Veo todo lo que siempre se aferró a escapar de mí y huyo de todo lo que no quiere dejarme ir. Lucho para vivir y sentirme viva, pero soy incapaz de sentir nada sin ti a mi lado. Envíame un salvavidas. Veo como todo lo que tenía se desvanece en segundos, y sigo escapando de la realidad. El mundo es demasiado grande para no preguntar ¿por qué? Pero las respuestas no caen del cielo...
Y sigo luchando para vivir y sentirme viva pero soy incapaz de sentir nada si ti a mi lado.

domingo, 16 de agosto de 2015

No sé como respirar bien ahora que mi pequeño se fue. Quiero patear y gritar y traerlo de vuelta. Lo daría todo porque se fuera este vacío y más que nada… no quiero decir Adiós.

miércoles, 29 de julio de 2015



Some people don't understand this... They don't understand how desperate I am to have someone say, I love you and I support you just the way you are because you're wonderful just the way you are. They don't understand that I can't remember anyone ever saying that to me. I am so demanding and difficult for my friends, my family and my love because I want to crumble and fall apart before them so that they will love me even though I am broken. 

domingo, 12 de julio de 2015

A veces me pregunto qué hubiera pasado si Diego no hubiera enfermado… Mamá no habría dejado su trabajo, papá no trabajara el doble, mi familia se reuniría en casa para almorzar juntos como cada domingo, y yo definitivamente tendría el corazón de vuelta. Ahora mi madre se dedica solo a mantener vivo a Diego, a no dormir y pintar para olvidarse por un momento que vive en un hospital con un hijo con SD desahuseado. Se puede decir que en mi pequeña familia somos un poco disfuncionales, pero todos nos queremos y nos esforzamos, un hermano enfermo es un gran trabajo, aunque mi madre y yo nos esforzamos por mantenernos fuertes como todos afuera nos ven, estamos consientes que en cualquier momento, nuestra vida y nosotras, nos podemos desmoronar. Mi familia esta medio desunida, los parientes de papá son distantes, los de mamá nos vuelven loca. Es difícil imaginar, pero hubo un tiempo atrás antes de que pasara esto donde mi hermano y yo éramos niños normales y todos éramos felices... Mi hermano está muriendo, tiene 85% de células leucémicas su doctor dice que si fuera un tumor probablemente tendría otro cuerpo a su lado... Durante años me he negado a aceptar la realidad, pero es tiempo, sé que mi pequeño no se quedara por mucho, va a morir. Supongo que siempre lo he sabido, nada más no sabía cuándo. Esta enfermedad no solo esta matando a Diego, está matando a mi familia también. 
Estamos en el final.

lunes, 6 de julio de 2015






I wish I was cold as stone,
then I wouldn't feel a thing.
I wish I didn't have this heart,
then I wouldn't know the sting of the rain.
I could stand on my own
letting your memory fade
I wouldn't hurt like this,
or feel so all alone.
I wish I was cold as stone.

domingo, 21 de junio de 2015

Hace un par de meses alguien me sugirió que debía de vivir mi propia vida y no la de mi hermano, o al menos no vivirla a través de él. Lo único que pude pensar al escuchar tal "sugerencia" fue: ¡Eres un cretino! ¡Callate!. Eso en definitiva me resultó el colmo. Las personas hablan mucho de temas que creen conocer, pero que ciertamente no es así... Como algunos en mi familia y el cretino que me dio su no consultada opinión acerca de mi insistencia por pasar el mayor tiempo posible en el hospital con mi pequeño. Según él, debía hacer tiempo para salir y tener una cita con él en lugar de pasar día y noche  cuidando de mi hermano. Desde cierto punto y restandole la manera increíblemente imbecil en la que ése fornido anestesista me lo dijo, tenia razón debía hacer tiempo, no para ese bruto! sino para mi. Así que eso hice,  me acerque a mis mejores amigos y me deje querer con mi familia.
Al final debo decir que aun lidió con este tema de sentir que nadie comprende por lo que paso, salvo un par de personas que irónicamente no son ni mi familia ni los mas cercanos a mi. 
Asi que, por favor si usted no sabe o no ha estado en los zapatos de alguien más alguna vez en su vida, -No sea cretino, callese! 

sábado, 13 de junio de 2015

domingo, 31 de mayo de 2015


El dolor de hoy está aquí y no se va. 
Estoy en una montaña rusa que no hace más que bajar mientras todo el mundo quiere hablar de los increíbles planes de Dios, pero hoy no me trago esas teorías y escucharlas sólo me aflojan las ganas de vomitar, gracias pero venga hablarme de eso otro día. Cuando su hermano con SD y LLA le pregunte cuando irá a casa luego de pasar semanas sufriendo otra dolorosa recaída. Cuando cuatro años de súplicas no han sido escuchadas por un Dios indescriptiblemente ausente y ocupado buscando estacionamiento para ancianos... Estoy cansada y triste e inmensamente molesta! No puedo superar mi renuencia a aceptar esta horrible realidad, cómo voy a prepararme y hacerle frente? Cómo? Está noche no puedo mantener la apariencia y reprimirme. No me preocupa que aquellos que me conocen intenten censurarme! Como si Dios no supiera todo lo que estoy sintiendo. 
El dolor de hoy está aquí y no se va...

lunes, 18 de mayo de 2015

El mundo es demasiado grande para no preguntar ¿por qué? Pero las respuestas no caen del cielo. No estoy preparada para esto, como podría estarlo? No sé como respirar adecuadamente sin que ese enorme nudo en mi garganta se forme. Procuro tran­quilizarme recitando la frase de aquella famosa mística del siglo XIV, Juliana de Norwich: “Todo irá bien, y todo irá bien, y todas las cosas del mundo irán bien”. Pero no me lo creía. Nada iba bien. Ni una sola de las malditas cosas del mundo iba bien.

Y sigo luchando para vivir y sentirme viva pero soy incapaz de sentir nada si ti a mi lado.

martes, 21 de abril de 2015

En todo caso, puede decirse que a mí me ha pasado lo mismo. He tenido que cantarme una serenata a mí misma, en la calle donde vivo, bajo la ventana de mi habitación, para convencerme de que acepto mi nueva relación. Ese ha sido el motivo de mi esfuerzo. Lo siento si parece que, al final de mi relato, estoy agarrándome a un clavo ardiendo para alcanzar alguna conclusión razonable. Es algo que necesito y no me queda más remedio que buscarlo. Desde luego he necesitado los tranquilizadores libros sobre el compromiso, de mi escritora favorita Elizabeth Gilbert. Quizá sus teorías no le sirvan a todo el mundo, no todos la necesitan de la misma forma que yo. De paso estoy he decidido darme la oportunidad en la larga y curiosísima historia del amor. Y es ahí, recordando a todas las parejas tercas de la historia, que también han aguantado este tipo de cosas absurdas y entremetimientos irritantes para lograr lo que querían realmente: un lugar privado donde aprender del amor. 

Roma, no seas idiota esta noche!

Ciertas culturas parecen entender esa necesidad de persuasión. En algunas sociedades según leí hace poco, la tarea de convencer a una mujer de que acepte una propuesta de amor se ha convertido en una ceremonia. En Roma, en el barrio obrero del Trastévere, se mantiene la costumbre de que si un chico se quiere casar con una chica debe cantarle una serenata. La canción le sirve para pedirle la mano, cosa que sucede en plena calle, a la vista de todos. La escena siempre comienza del mismo modo. El joven llega a casa de su amada con un grupo de amigos y varias guitarras. Una vez situados, le cantan a la chica a todo pulmón, una canción con el titulo poco romántico de “Roma, nun fa’la stupida stasera” (Roma, no seas idiota esta noche). Resulta que el joven no le canta directamente a su amada, porque no se atreve. Lo que quiere de ella (su mano, su vida, su cuerpo, su alma, su devoción) es tan monumental que pedírselo directamente le da pánico. Por eso le dirige la canción a la ciudad entera de Roma, demostrando su pasión con voz tosca, ronca e insistente. Lo que pide, con todo su corazón, es que la ciudad le ayude a convencer a esta mujer de que se case. “Roma, no seas idiota esta noche! Ayúdame! Llévate las nubes para que la luna sólo se vea desde aquí! Haz brillar tus estrellas más relucientes! Sopla el viento del oeste! Embriáganos con tu aroma! Haz que aparezca primavera!”. Al sonar los primeros acordes de esta canción popular, la gente del barrio se asoma a las ventanas y así comienza la participación del público en el evento. Los hombres de las casa vecinas se asoman a los balcones, increpando a los cielos con el puño cerrado, regañando a la ciudad de Roma por no asistir más activamente al chico en su plegaria nupcial. Todos los hombres del barrio cantan: “Roma, no seas idiota esta noche! ¡Ayúdale!”. Entonces la chica –el objeto de su deseo- sale a la ventana. A ella también le corresponde cantar un verso de la canción, aunque en sus palabras hay otra intención. Cuando le toca el turno de cantar, también ella ruega a Roma que no sea idiota esta noche. También ella suplica a la ciudad que la ayude. Pero lo que quiere es algo completamente distinto. Lo que pide es fuerza para rechazar al hombre que la corteja. “Roma, no seas tan idiota esta noche”, ruega en su canción. “Cubre la luna con un velo de nubes! Oculta tus estrellas más relucientes! No soples, maldito viento del oeste! Llévate tu aroma de primavera! Ayúdame a resistir!” Entonces es cuando las mujeres del barrio se asoman a los balcones y cantan a coro con la chica: “Por favor, Roma, ayúdala!” Un duelo apasionado de voces femeninas y masculinas se alza por las calles de Roma. La escena es tan dramática que las mujeres del Trastévere parecen estar rogando por su vida. Curiosamente, los hombres están haciendo lo mismo. En el fragor del encuentro, todos parecen haber olvidado que, en última instancia, se trata de un juego. Desde el comienzo de la serenata ya se sabe cómo va a acabar la historia. Si la mujer se ha acercado a la ventana, si se ha dignado a entornar los ojos hacia el hombre que está en la calle, significa que acepta la propuesta. Al asumir la mitad del espectáculo que le corresponde, la chica está demostrando el amor que siente. Pero para demostrar que tiene orgullo (o tal vez por un miedo muy comprensible), la joven debe hacerse rogar, aunque solo sea para compartir sus dudas y temores. Va a hacer falta toda la pasión del joven enamorado, toda la belleza épica de la ciudad de Roma, todo el brillo de las estrellas, toda la seducción de la luna llena y todo el aroma del viento del oeste, para que la chica le dé el “Si”. 
Dado lo que está en juego, se podría decir que toda resistencia es poca y todo espectáculo se queda corto...

sábado, 18 de abril de 2015

Así que eso fue lo que hice... Me reconcilie y deje a un lado mi recelo por las relaciones y me convencí a mi misma de darme otra oportunidad. Procuré hacerme un pequeño hueco que me resultase cómodo al lado de un joven. Claro que no fue tan fácil como ahora lo escribo. ¿Todas las mujeres están aterradas antes de darse otra oportunidad como yo? Le pregunto a mi querida amiga Madai, y ella halándome un cachete con gran tranquilidad, respondió:”Solo tienen miedo las que piensan”. Ja y me lo dice a mi pensé. En fin, el caso es que yo lo he pensado mucho. Dar el salto al noviazgo no ha sido sencillo, pero quizá no tenga por qué serlo. Tal vez sea normal que necesite convencerme para volver a ser una novia –por arduo que sea el proceso- y sobre todo porque soy una mujer independiente y porque he estado sola mucho tiempo.

lunes, 13 de abril de 2015

Debo confesar que a mis 18 tenia un escaso sentido del amor, o ninguno. Era una ignorante del tema y como no si apenas estaba comenzando a vivir. No sabía lo que quería y no digamos mi futuro amoroso, así que, como es de suponer, pagué muy caro esa inconsciencia. Sufrí las consecuencias en carne viva, año y medio después, en el lúgubre entorno depresivo de la separación. Pero en este momento a mis bastante menos aturdidos 22 años tampoco creo saber demasiado sobre las relaciones. Como mi última relación había fracasado terriblemente todo el asunto me daba pánico pero eso no me convertía en una experta en la materia; en todo caso en una experta en el error y el terror, dos campos donde ya abundan los expertos. Pero mi destino parecia exigirme una nueva relación y ya he vivido lo suficiente como para saber que las intervenciones del destino a menudo son una invitación para afrontar o incluso superar nuestros mayores miedos. No hace falta ser un genio para reconocer que si las circunstancias te empujan hacia aquello que más odias y temes, en el peor de los casos irás hacía una oportunidad interesante para crecer. Eso es lo que he ido rumiando últimamente. Y debo aprovechar esas intervenciones del destino para tal vez reconciliarme con la noción de las relaciones antes de volver a meterme en ellas de narices. Quizá me ha llegado el momento de intentar desentrañar el misterio divino y humano de esa estado -confuso, frustrante y contradictorio, pero obstinadamente imperecedero- que llamamos noviazgo.


jueves, 2 de abril de 2015

Reconozco francamente que después de todos los años que han pasado aún tengo luchas con algunas cosas acerca de la enfermedad de mi hermano. Todavía el escuchar explicaciones simplistas y comentarios poco serios me revuelven el estomago. Sobre todo cuando me encuentro con personas que no saben reaccionar ante la terrible situación de otra, y dicen; "orare por tu familia", lo cual puede significar: "realmente ya no estoy escuchando lo que dices". Esa y las explicaciones huecas pueden ser una manera de ponerle fin a la responsabilidad de ayudar a alguien a llevar su carga. Aunque a veces casi puedo escuchar a la gente decirme: No digas eso, No pienses así, ¡Estas loca! cuando intentan "animarme", no puedo evitar querer contestarles; Si mira, ven hablarme otro momento. ¿A quién trataría yo de engañar escondiendo el enojo y el dolor de mi corazón?. Por ejemplo recuerdo el día en que tuvieron que sacarle fluido espinal a mi hermano y fue simplemente doloroso e insoportable, no solo para mi pequeño sino también para mi. Me encontraba en estado de conmoción y me puse a recorrer de un lado a otro el deposito de cadáveres, que esta al fondo del hospital. Aquel era el lugar donde pensaba que yo debería estar, rodeada por la muerte. Estaba luchando con algo más importante que la enfermedad de mi hermano, a pesar de todo lo terrible que esta era. Estaba luchando por entender lo que sucedía. Esa noche mi amigo Leon se llevó la peor parte dejándome hablar y desahogar la frustración y enojo que sentía. No me censuraba, ni tenia que preocuparme por lo que él pensara. No me dio explicaciones, ni cito las repetidas frases cliché. Me permitió hacerle frente a mi dolor.
A veces es extraño como alguien desde la distancia puede comprender mejor lo que otros estando cerca no pueden, y como el solo mero hecho de escuchar y no intentar resolverte el problema te puede dar la sensación de que no estas solo.

lunes, 30 de marzo de 2015

Al fin me he tomado un tiempo para concretar palabras y convertirlas en ideas que es lo más cercano a tiempo para mí que he tenido. Y he tenido tanto por escribir pero no el ánimo para hacerlo. Aunque escribir siempre ha sido mi salvación últimamente permanecer en silencio y olvidar lo ha sido también. No quiero dejar de escribir, es lo único fiable con lo que cuento. Pero sigue siendo difícil recordar en palabras lo que no quieres olvidar.

Hoy no tengo tiempo, ni espacio. Es más, ya sólo me quedan tres canciones en un bolsillo, dos cigarros en el otro, y un abrazo bien doblado.

sábado, 21 de febrero de 2015

Conozco personas que se pueden instalar en cualquier sitio del mundo siempre que les dejen un esquinita; yo no, porque soy muy  inquieta. Claro que quiero mi esquinita, pero si se trata de instalarme para siempre quiero estar segura de donde y con quien me estoy metiendo. Creo haberlo mencionado un par de veces ya, yo no me quedo por mucho tiempo y ese es uno de mis peores defectos por no decir el peor. Y  es precisamente esa inquietud que me convierte en una escurridiza  <Prima Marce, la Loca> que se marcha sin previo aviso ni explicaciones.


Ruego me perdonen por ello.


miércoles, 18 de febrero de 2015

In the shallows II

Lo que  aquella situación me demandaba era acudir a mi viejo ritual de ponerme de pie, ser fuerte y no cobijar pensamientos insanos. Pero esa noche había caído a las aguas más profundas de la tristeza y la desesperación. Junto con los estragos de la recaída de mi hermano y las tontas de depresión y soledad acechándome pase la noche entera hecha un ovillo de llanto, intentando convencerme a mí misma de que era una tontería contarme las venas con un cutter, o alguna otra genialidad, como tomarme un frasco de pastillas o salir corriendo a tirarme a la carretera para dejar de sufrir. Pero eso de pasarme la noche contemplando la idea del cutter fue definitivo. 
A la mañana siguiente sabía perfectamente que necesitaba ayuda, no podía pasar otro día sin dormir y comer, apestando la casa de humo y faltando a la universidad. Pero no podía pensar en alguien que pudiera ayudarme. Sabes que hay personas maravillosas cerca tuyo pero cuando has pasado por una situación así y no se te ocurre el nombre de alguno de ellos para llamar y suplicarles ayuda, estas completamente jodido. No podía llamar a mis mejores amigos para contarles lo que paso… ¿De qué serviría? Ya llevaban meses viéndome desmoronarme, viéndome comportarme como una demente. Mi madre que estaba al otro lado de la ciudad no podía ayudarme, suficiente trabajo tenia cuidando a un hijo en el hospital como para llevar a otro en busca de ayuda. Sabía que me pasaba algo pero estaba cada vez más harta del tema. Y con justa razón, había pasado meses descuidando todo lo que me importaba; familia, amigos, estudio. Y estaba exhausta y sola como solo puede estarlo una persona que había dejado de creer y se estaba cayendo a trozos. 


Todo lo que escribo a veces me cura. Y a veces me quema. Lo que no sé es cuándo sucede lo uno y lo otro.

In the shallows I

Estoy sola; estoy completamente sola. Estoy más sola que  la luna. Una vez asimilado el hecho, me pongo de rodillas con la frente en el suelo. Y en esta postura en actitud suplicante, permítanme quedarme así mientras retrocedo en el tiempo, hasta un momento en el que estaba yo exactamente igual en la misma postura: de rodillas en el suelo. En la escena de finales de septiembre o principios de octubre o bien pudo haber sido la semana pasada.  No estaba en el suelo, sino hecha un nudo en mi cama. Hacia frio y era como la una de la mañana, llevaba dos semanas viviendo sola y como siete noches consecutivas escondiéndome debajo de las sabanas y exactamente igual que en las noches anteriores –estaba llorando. Ya no quiero continuar. Estaba haciendo todo lo posible por no enterarme del tema, pero la verdad se me aparecía con una insistencia cada vez mayor. Esta vez todo fue diferente, de verdad no quería continuar. No quiero vivir en esta casa tan grande y fría. No quiero tener que ser fuerte. No quiero continuar, me repetía entre sollozo y sollozo...

viernes, 2 de enero de 2015

I want him but we’re not right.


I’m wasted, losing time
I’m a foolish, fragile spine
I want all that is not mine
I want him but we’re not right
In the darkness I will meet my creators
And they will all agree, that I’m a suffocator
I should go now quietly
For my bones have found a place to lie down and sleep
Where all my layers can become reeds
All my limbs can become trees
All my children can become me
What a mess I leave
To follow...